Baterías de Vanadio (VRB)
Mecanismo de funcionamiento
Las baterías redox de vanadio son las más desarrolladas tecnológicamente dentro de las baterías de flujo, en estas, la energía se almacena mediante iones cargados que se encuentran en dos tanques de electrolito separados, de forma que uno contiene electrolito para las reacciones de electrodo positivo y el otro para las reacciones del electrodo negativo. Además, estas emplean pares redox de vanadio disueltos en mezclas diluidas de ácido sulfúrico, eliminando de este modo el problema de la contaminación por difusión de iones de un lado de la membrana al otro lo que hace que la vida útil del electrolito sea prácticamente infinita.
Capacidades y ciclo de vida
Estas poseen una vida útil de unos 20 años y un número de ciclos equivalente a lo largo de su vida de alrededor de 20 000, los sistemas de batería de vanadio suelen diseñarse para suministrar energía en un rango de tiempo que va desde las 2 horas hasta las 8 horas, lo que les permite poseer un rendimiento del 90%. El costo de adquisición puede llegar a ser elevado, debido a que el precio del electrolito es dependiente del precio del vanadio a nivel internacional, por lo que se puede decir que el precio se encuentra alrededor de 400$ por kWh.
Aplicaciones
Estas suelen utilizarse para asegurar la calidad del suministro de energía evitando que el usuario se vea afectado por incidencias de corta duración y para el almacenamiento eficaz de energía el cual permite que las zonas alejadas puedan tener acceso a la entrega continua energía, sin intermitencias en el flujo, abriendo amplias posibilidades hacia las energías limpias.
Ventajas
Entre las ventajas de estos dispositivos se puede mencionar que tienen una gran rapidez de respuesta de carga/descarga, pueden proporcionar altas potencias en un milisegundo y que suministra más de dos veces su potencia nominal en cortos periodos de tiempo hasta varios minutos.
Desventajas
Las desventajas de estas son que poseen baja densidad de energía por volumen, tienen un sistema complejo en comparación con las baterías convencionales y el hecho de tener que circular grandes volúmenes de electrolito con bombas limita la aplicación de estos sistemas en el sector de transporte.